Elecciones y libertad 2

ELECCIONES Y LIBERTAD 2

Hace bastante que no había escrito, así que no pudiendo resistir más la tentación ofrezco a ustedes una reflexión del libro de DANIELA GARCÍA PALOMAR: ELEGÍ VIVIR, basado en su experiencia real de un viaje en tren a Temuco, su caída por un hoyo que existía entre los vagones de un tren, la pérdida de sus dos piernas y de sus dos manos, sus operaciones y su posterior recuperación en EE.UU, su obtención de su título de doctor y su posterior ejercicio de su profesión en la TELETÓN. 

La experiencia de DANIELA es un buen ejemplo que combina las dos dimensiones de la libertad: la libertad de … y la libertad para… y la unión de lo concreto (de) y lo abstracto (para) pero además nos permite considerar lo que llamamos espacios de libertad.

El espacio de la muerte estaba sobre las líneas del tren, el de la vida fuera, el espacio fuera de las líneas del tren pudo transformarse en un espacio de muerte pero ella fue llevada a un espacio de vida por una ambulancia que le prestó sus primeros auxilios y contuvo la hemorragia, si no pasaba de ésta a un hospital perdía la oportunidad de ingresar a un nuevo espacio de vida, si perdía el conocimiento antes de la operación también, lo mismo sucedía si en el quirófano además de terminar con la hemorragia no la operaban pensando en un futuro implante de prótesis, o en Santiago si no quedaba a cargo de un especialista en recuperación mediante estos implementos, o no era conducida a EE.UU para ponerle piernas y manos. Lo que queremos decir es que el nuevo desarrollo de Daniela fue un proceso dinámico de muerte y vida.

Hasta aquí pareciera que la libertad de Daniela sólo dependía de factores externos a ella, pero eso es así porque queremos destacar que sin ellos su consecución de la libertad hubiera sido imposible pero tan importantes como ellos son los factores personales: arrastrarse para salir de las líneas del tren, gritar para recibir ayuda, hablar sin parar hasta que en el hospital la operaran, pedirle ayuda  a su padre médico para que él creara las condiciones para su recuperación, consentir para todas las operaciones necesarias, colaborar con todos los tratamientos, vencer su miedo al fracaso, fijar y perseverar en sus metas parciales.

No queremos dejar de mencionar a un enemigo de la libertad: la opinión pública y la denigración personal: Desde el primer momento se acusó de drogadicta y aprovechadora a Daniela con el fin consciente o inconscientemente de privarla de los medios para su rehabilitación justificando la acción de ferrocarriles de implementar un viaje con vagones de trenes en mal estado, intención que abortó porque un compañero de ella tomó una foto del hoyo existente en el piso del vagón.

Sin desconocer las características personales excepcionales de Daniela queremos afirmar taxativamente QUE SE ES LIBRE SOLO SI LA PERSONA TIENE LA OPORTUNIDAD  DE CREAR ESPACIOS SOCIALES DE LIBERTAD Y QUE SI BIEN TODO SER HUMANO POSEE LAS CONDICIONES PARA ELLO, ESTA NO VIENE DADA SINO QUE SE CONSTRUYE CON ESPERANZA Y OPTIMISMO.