Alzheimer

 ALZHEIMER 


Mi nieto me hizo un test para Alzheimer. Era sencillo consistía en nombrar un año y debíamos contestar si en nuestra mente aparecía o no una imagen definida. Mi esposa para cada año tenía una imagen correspondiente, mientras que poseía una sola correspondiente al año 1973, cuando se nos avisó que debíamos abandonar la que hoy día tiene por título Universidad Católica sede Temuco pero que en ese momento le decíamos universidad de la Frontera, título que mediante un simple decreto se le adjudicó a la Universidad de Chile de la misma ciudad.


El test aplicado por mi nieto fue concluyente tengo un avanzado estado de ALZHEIMER y lo peor es que no tiene remedio pues a eso se agrega una casi inexistente ubicación espacial y temporal: recuerdo muchos acontecimientos pero el significado de cada uno de ellos no lo puedo compartir con casi nadie, excepto algunos que se lo conté a mi hermana o ella misma estuvo presente.


Estoy condenado a mirar todas las cosas desde una mentalidad madura, (debiera decir de grande, pues me parece que madura está muy relacionada con el narcisismo) la mirada infantil se me escurre por los dedos y espero que cuando mi nieto y nieta tenga veinte años.


alcance a vislumbrar las riquezas de sus personalidades, si no me he muerto antes.


Quiero dejar en claro que no todo es negativo: pues para mí la vida tiene y va cobrando un sentido y significado único es por eso que debo encontrar una forma también única y que pueda compartir con otros de almacenar mis recuerdos y no terminar mi trayectoria vital como un caparazón vacío. Al estar vacío de imágenes tengo una mayor oportunidad de estar lleno de significados es lo que me ocurre con mi hija y esposa ¡qué de hermosos “no recuerdos” habitan en mi interior, aunque a veces desearía agregarle a ellos la tangibilidad de los recuerdos.


Otra perspectiva positiva de no poseer ubicación espacial, ni temporal y no recuerdo de rasgos faciales  es que cuando me  vuelvo a encontrar con una persona después de un largo tiempo tengo la sorpresa que quien me parecía feo o antipático ahora me es lo opuesto y esto se debe  a que las apariencias engañan mientras que el significado ni el sentido no, o puedo deberse a que me doy el tiempo de mirarlo.


Lo raro de todo esto es que en el plano político el Alzheimer es una efectiva herramienta de convencimiento y salvación: me recuerdo que hace muchos años atrás existía un yate que se movía entre Puerto Montt y Punta Arenas e incluso más al sur y contrajo una deuda tan enorme con su tripulación y proveedores que muchas personas temieron que iría a la quiebra. Le preguntaron al dueño que haría para pagar la deuda y éste contestó que nada y que para resolver el problema se proponía agrandar su yate, aumentar sus servicios y aumentar el número de sus acreedores y afirmó que si de esta manera lograba meter en la mente de las personas el deseo que el yate siguiera navegando y el convencimiento de la importancia económica para la región los “perdonazos” lloverían sobre él y su futuro económico estaría asegurado. Parece que si. Si pudiera acordarme del nombre del yate podría terminar este artículo con las palabras “y La Corte Suprema puso en marcha la operación …. (aquí el nombre del Yate) y a través del sobre endeudamiento arroja un bote salvavidas a las ISAPRES que de otra manera no podrían seguir existiendo.


BENDITO ALZHAIMER QUE PERMITE QUE ALGUNAS ACCIONES VUELVAN A REPETIRSE PORQUE SE HA OLVIDADO QUE DE LA MISMA MANERA SE SALVARON LOS BANCOS DURANTE EL GOBIERNO MILITAR Y LOS SINVERÜENZAS QUE NOS RESULTABAN ANTIPÁTICOS MUESTREN AHORA UNA CARA DE BEATITUD Y HASTA SIMPÁTICOS NOS PARECEN ¿o no? 

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