asesino en serie solapado

 ASESINO EN SERIE SOLAPADO

La verdad es que no tenemos claro si este es un artículo político o  un análisis literario. La intención política si la hay la puede poner el lector si es mal pensado o un crítico de la realidad, el análisis literario lo ponemos nosotros ya que esta reflexión surge del ultimo caso investigado y “resuelto” por el detective creado por Agatha Christie, Hercules Poirot.

Poirot está intrigado por cinco asesinatos cuyos autores fueron todos descubiertos por la policía y tuvieron que sufrir sus respectivas condenas: la pena de muerte, sin que en ninguno de los casos se pudiera determinar el móvil y comparándolos unos con otros parecía no tener nada en común, salvo la presencia de una misma persona en todos ellos de la cual el detective piensa que es el asesino que ha aprendido a matar con la seguridad de que nunca será descubierto, precisamente porque es capaz de identificar exactamente los ambientes socio afectivo emocionales que se prestan para saciar su sadismo y su sed de sangre.

Poirot seguro de haber identificado al asesino y habiendo identificado las características de los escenarios en que se mueve se va a vivir al mismo hotel en que este está residiendo y con la ayuda de su amigo Hasting empieza a reunir pruebas contra él y a llevar a cabo un plan para ejecutarlo ya que por su forma de actuar estaba completamente fuera del alcance de la justicia.

Vamos a poner un ejemplo de como actuaba el asesino para que los lectores puedan hacerse una idea de qué estamos hablando: Una mujer ridiculiza a su esposo frente a los otros huéspedes, el asesino sabiendo que la esposa después de hacer esto va a ir a recoger verduras a la huerta y el esposo va a ir cazar, con sus palabras profundiza la humillación de este, con la convicción de que si tiene una escopeta en la mano y su esposa se pone a distancia de tiro él inconscientemente, le va a disparar intentando matarla, que es lo que verdaderamente ocurre, pero felizmente como la hiere solamente el episodio es calificado de accidente. ¿Cuál es entonces el mecanismo que emplea el asesino: Incitar a través del lenguaje a personas sin ese instinto a cometer un crimen de tal manera que cuando la policía busque el móvil en el autor material, le sea imposible porque se encuentra en otra parte “el autor intelectual”.

Siéndole a Poirot imposible probar la culpabilidad del “autor intelectual”, pues las palabras se las lleva el viento, lo ejecuta, pero amante del juego limpio deja suficientes pistas para que se descubra lo que hizo, dejando en manos de Dios que juzgue la justicia de sus actos, facilitando o dificultando a la policía el descubrimiento de lo que pasó.  como no se establece la culpabilidad del detective se debe llegar a la inevitable conclusión que lo que hizo es justo.

AFIRMAMOS TAJANTEMENTE QUE EN TODOS LOS AMBITOS DEL QUEHACER NACIONAL CON SANGRE O SIN SANGRE LOS ASESINOS EN SERIE EXISTEN.