Día del profesor

 SALUDO A LOS PROFESORES 

Estimados profesores 

Hoy el país ha elegido  este día de reconocimiento a la hermosa labor que realizan al que me sumo yo como debieran hacerlo la mayoría de los apoderados de los alumnos con los que ustedes trabajan en estos dolorosos y difíciles tiempos de pandemia en el que ustedes hacen todo el esfuerzo y los mayores sacrificios para mantener en funcionamiento el sistema educacional en casi todos los países del mundo, aunque nos referimos aquí especialmente a Chile.

Las pandemia que nos azota nos ha robado muchas cosas como el aire, el mar, el agua, las calles de la ciudad, los lugares de esparcimiento, la renovación de la cultura etc., sin embargo lo que no debiera robarnos es el amor, el sentido de la vida, la esperanza y el sentido de misión.

Una persona a quien yo quiero mucho me dijo que yo era una alcachofa refiriéndose que a través del tiempo uno va construyendo su vida creando un fondo que debería ser lo esencial lo permanente, lo valioso y que ese fondo lo va recubriendo con hojas hasta que llegan a ser tantas que uno termina escondiéndose detrás de ellas y protegiéndose de peligros que sólo están en nuestra imaginación pero que perjudican seriamente mi relación con el otro, mis familiares y en general mi prójimo.

Soy un profesor jubilado y como tal no pude dejar de hacerme esas preguntas importantes que constituyen el fondo de la alcachofa  ¿cómo está ahora en ti el amor, el sentido de la vida, la esperanza y el sentido de misión? ¿Cómo está ahora en relación a tu familia inmediata, en relación a tu familia? ¿Cómo está ahora en relación al prójimo en general? 

Las respuestas que me di fueron desastrosas: en algunos casos no existían, en otros pertenecían a las hojas de las alcachofas y en otras simplemente no había pensado en ello.

¿Cuál era una de las posibles causas de que esto sucediera? La respuesta en principio me desconcertó y me dejó perplejo: nunca has entendido ni el sentido que debe tener la enseñanza ni el sentido que debe tener la educación y dejaste que tu labor de profesor te abrumara y te vaciara de humanidad.

Debido a eso empecé un proceso para volver a querer a las personas (en su sentido profundo por supuesto) a separar las hojas inservibles de las pocas que si lo son, en síntesis en volver a amar, desprenderme de los prejuicios y dejar que con su libertad los demás se hagan responsables de sus actos, tomando en cuenta como referencia dos aspectos, siempre el otro será un misterio para uno, que sólo se revelará en parte sí logro despertar en el su buena voluntad y no olvidar que como fuimos creados a imagen y semejanza de Dios no todo lo hecho debe haber sido dañino en el sentido espiritual.

Estimados profesores realicen su labor  de entregar información no sólo con un significado sino también con un sentido y procuren que éste tenga la posibilidad de ser captado por sus alumnos, valorado y elegido por ellos.

Estimados profesores realicen su labor de tal manera que terminada esa etapa de su vida todavía tengan una familia y lo más importante que puedan hablar con ella, sabiendo que están compartiendo algo construido en común.

Al finalizar queremos extender un cariñoso saludo a todos los docentes y desearles  el éxito que Dios quiere que tengan y la satisfacción de contribuir a que sea la facultad espiritual que ordene y contribuya a valorar adecuadamente cada uno de los aspectos de la imagen de Dios en sus vidas.

FELIZ DÍA PROFESORES QUE LA BONDAD DE DIOS RESPLANDEZCA SOBRE CADA UNO DE USTEDES Y SU GLORIA SEA SU RETAGUARDIA (versión libre de un versículo bíblico)